Cuando estuvimos en Granada pasamos una tarde especial en familia, en el paseo Padre Manjón (más conocido como el Paseo de los tristes). Este paseo tiene como telón de fondo la Alhambra, y como acompañante el río Darro. Es un lugar con encanto como muchos otros de Granada donde hay muchos bares y gente disfrutando del día. Lo que no sabíamos en ese momento, es que aquel sitio escondía unas leyendas misteriosas de las que en esta entrada os contaremos. Hay que decir que Granada está repleta de leyendas y casas encantadas. Y además me atrevería a añadir que es una de las ciudades con más casos paranormales en España. Pero como no podemos escribir sobre todo ésto (más que nada porque necesitaríamos un blog aparte exclusivo a ello), nos centraremos en las historias que hay tras el Paseo de los tristes.
Por qué tiene el sobrenombre de el "Paseo de los tristes"? Porque en el siglo XIX, comenzaba en ese lugar el camino que subía hacia el cementerio. En su época algunas personas de la comitiva que acompañaba al difunto se despedían en ese lugar, ya que su estado físico les impedía subir la cuesta que llevaba al cementerio. A pesar de eso, es difícil sentir energía negativa, ya que a día de hoy el paseo está lleno de vida con sus bares de tapas y turistas de acá para allá.
Antes de llegar al Paseo de los tristes, nos da la bienvenida la casa de Castril, un edificio renacentista del siglo XVI que nos guarda una trágica leyenda. La casa era de Hernando Zafra, secretario de los reyes Católicos, y al ser viudo vivía él solo con su hija. Su hija mantenía relaciones sexuales con Alfonso Quintanilla, hijo de uno de sus enemigos. Hernando estuvo apunto de pillar a Alfonso, pero al abrir la puerta, éste se había escapado por la ventana y lo que vio, fue a su hija desnuda al lado del paje que les ayudaba a verse a los amantes. El padre muy enfadado, cogió al paje y lo ahorcó en la ventana, mientras le decía "colgado quedarás esperándola desde el cielo" y mandó esculpir la frase en la ventana de su hija como advertencia para que a nadie más se le ocurriese acostarse con su hija. Aún así, tapió la ventana para que fuera más difícil acceder a la habitación. Dicen que su hija se suicidó por no poder soportar la muerte de su amor, y por vivir tristemente confinada en su habitación. Dicen que su fantasma vaga por el edificio y que se han llegado a escuchar llantos de tristeza. Actualmente es el museo arqueológico y etnológico de Granada.
El Paseo de los tristes acompaña al río Darro, y tiene unas vistas impresionantes de la Alhambra en lo alto, pero si bajamos la mirada desde ésta, veremos rodeado de bosque, un imponente edificio abandonado. Se trata del antiguo Hotel bosques de la Alhambra, que fue construído en 1908, aunque no fue inaugurado hasta 1910. El hotel fue todo un fracaso. A pesar de encontrarse en un lugar maravilloso en las faldas de la Alhambra y muy cerca del río, no tardó en cerrar sus puertas, ya que la gran humedad que existe en el lugar hizo que los huéspedes llegarán a enfermar por el frío. Además el edificio sufría ciertos deterioros por los problemas con las humedades. Al cerrarse el hotel, aquello tuvo otro uso de lo más surrealista. El edificio, se convirtió ni más ni menos que en el Hospital de Reuma, que como su nombre nos indica era un sanatorio para reumáticos ( por si no lo sabéis, humedad y reuma son una de las peores combinaciones, por eso nos parece surrealista) . Como era de esperar, no tardó mucho en cerrar sus puertas.
También se dice que después de ser un hospital, aquello se convirtió en un burdel. Hoy en día al edificio se le conoce como "la casa de muñecas", y como en todo edificio que anteriormente ha tenido una historia, són numerosas las leyendas fantasmales que se cuentan. Dicen que por sus pasillos vaga el espíritu de una enfermera, y que en las ventanas han visto fantasmas asomarse, y muchas más historias de ese tipo. Algunos grupos de investigación paranormal han captado psicofonías, y han llegado a encontrar restos de supuestos rituales satánicos. También se cuenta que aquello fue un lugar de reunión de una orden masónica.
Como dijimos al principio, esto es sólo en la zona del Paseo de los tristes, pero en Granada hay mucho más misterios por descubrir.
